Desigualdades
Parece que la nueva ley integral de la mujer es inconstitucional. De hecho y se veía venir. Aunque los diez jueces que han votado en contra son, supuestamente, conservadores, el hecho es que esta ley es bastante carca. Se pretende acabar con la violencia machista a través de una ley discriminatoria. Esto es, acabar con la desigualdad a través de la desigualdad.
Muchas mujeres mueren cada año a manos de sus parejas, esto es una realidad incontestable. Pero el hecho de que las amenazas a una mujer sean delito y no lo sean las proferidas contra un hombre vulnera cualquier criterio de igualdad en la justicia. La respuesta es que hay menos hombres maltratados que mujeres, pero esos pocos hombres se quedan sin derechos. Una pena, vaya.
La mal llamada violencia de género es en realidad violencia conyugal o doméstica, pero no de género. A eso añadir que la Real academia de la Lengua manifestó que en castellano es un error identificar a género con sexo. Escribía un amigo mío que cuando un hombre maltrata a una mujer no lo hace porque sea una mujer sino porque es "su" mujer. Posiblemente ahí esté una de las claves del problema. Entre algunos hombres existe la idea de que la pareja es una propiedad más. Todavía tenemos que evolucionar mucho como sociedad para acabar con ideas como esta.
No creo que haya nadie que sepa cuál es la solución a esta plaga, pero sin duda no lo es dejar a millones de hombres españoles en una condición de desigualdad. Recordar que pese a los maltratadores y a los machistas de toda la vida ha habido muchos hombres que han creído en la igualdad y que han luchado por ella.
Mi padre me dijo una vez que cuando un hombre pega a una mujer demuestra ser muy poco hombre. Abusar de la fuerza no demuestra que uno es más fuerte, sino todo lo contrario.
El camino es largo y está lleno de incertidumbres, pero no creo que abriendo una brecha entre hombres y mujeres se solucionen los problemas. Una ley, sí, pero para todos, y para todos igual de contundente. Ahí es donde reside el principio de la justicia, quue sea igual para todos.
Muchas mujeres mueren cada año a manos de sus parejas, esto es una realidad incontestable. Pero el hecho de que las amenazas a una mujer sean delito y no lo sean las proferidas contra un hombre vulnera cualquier criterio de igualdad en la justicia. La respuesta es que hay menos hombres maltratados que mujeres, pero esos pocos hombres se quedan sin derechos. Una pena, vaya.
La mal llamada violencia de género es en realidad violencia conyugal o doméstica, pero no de género. A eso añadir que la Real academia de la Lengua manifestó que en castellano es un error identificar a género con sexo. Escribía un amigo mío que cuando un hombre maltrata a una mujer no lo hace porque sea una mujer sino porque es "su" mujer. Posiblemente ahí esté una de las claves del problema. Entre algunos hombres existe la idea de que la pareja es una propiedad más. Todavía tenemos que evolucionar mucho como sociedad para acabar con ideas como esta.
No creo que haya nadie que sepa cuál es la solución a esta plaga, pero sin duda no lo es dejar a millones de hombres españoles en una condición de desigualdad. Recordar que pese a los maltratadores y a los machistas de toda la vida ha habido muchos hombres que han creído en la igualdad y que han luchado por ella.
Mi padre me dijo una vez que cuando un hombre pega a una mujer demuestra ser muy poco hombre. Abusar de la fuerza no demuestra que uno es más fuerte, sino todo lo contrario.
El camino es largo y está lleno de incertidumbres, pero no creo que abriendo una brecha entre hombres y mujeres se solucionen los problemas. Una ley, sí, pero para todos, y para todos igual de contundente. Ahí es donde reside el principio de la justicia, quue sea igual para todos.
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