Miedo y asco...
La semana pasada leí que había muerto Hunter S. Thompson. Este tipo fue el creador del periodismo gonzo, que viene a ser algo así como que el periodista se convierte en el centro de la historia y monta unos pitotes de aquí te espero. Su mejor libro fue Miedo y asco en Las Vegas, un viaje psicotrópico-alcohólico-gamberril al corazón de la podedumbre norteamericana. Divertidísimo.
Hunter S. Thompson ha palmado a los sesenta y pico años de un tirotenía una gran colección de armas y un campo de tiro prvado--. El buen hombre se voló la tapa de los sesos. Los bienpensantes ultraconservadores han escrito pestes de Thompson, y su muerte todavía les da más material para ello. Pero esto del suicidio ya lo hacían los clásicos y creían que era preferible una muerte tranquila y rápida que una agonía eterna y una vejez decrépita. Así que otra vez el bueno de Hunter se ha pasado por el forro los convencionalismos sociales y ha decidido cuándo y dónde.
Nos quedan sus artículos en Rolling Stone, sus libros, y su rebeldía contra este mundo. Su estampa será siempre la de un tipo calvete, delgado, con sombrero de turista despistado, boquilla para fumar y gafas de sol oscuras. Menuda pinta.
Me hubiese gustado tenerlo de profesor y no a tanto subnormal provinciano de tres al cuarto.
Descanse en paz, Dr. Gonzo, estés donde estés espero que te montes una buena fiesta con narcóticos en abundancia.
PD. Decía Arcadi Espada que después de Hunter nos queda Michael Moore (ironía).
Hunter S. Thompson ha palmado a los sesenta y pico años de un tirotenía una gran colección de armas y un campo de tiro prvado--. El buen hombre se voló la tapa de los sesos. Los bienpensantes ultraconservadores han escrito pestes de Thompson, y su muerte todavía les da más material para ello. Pero esto del suicidio ya lo hacían los clásicos y creían que era preferible una muerte tranquila y rápida que una agonía eterna y una vejez decrépita. Así que otra vez el bueno de Hunter se ha pasado por el forro los convencionalismos sociales y ha decidido cuándo y dónde.
Nos quedan sus artículos en Rolling Stone, sus libros, y su rebeldía contra este mundo. Su estampa será siempre la de un tipo calvete, delgado, con sombrero de turista despistado, boquilla para fumar y gafas de sol oscuras. Menuda pinta.
Me hubiese gustado tenerlo de profesor y no a tanto subnormal provinciano de tres al cuarto.
Descanse en paz, Dr. Gonzo, estés donde estés espero que te montes una buena fiesta con narcóticos en abundancia.
PD. Decía Arcadi Espada que después de Hunter nos queda Michael Moore (ironía).
2 comentarios
eclisse -
Un saludito!! Qué no nos vemos nunca!!
I Fought The Law -