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librodearena

NO

Primero fue en 1789. La gente se cansó de parasiteo barato y monsergas por el estilo y le dieron un susto al tonto del haba de Luis XVI. Porquitos años después le hicieron un afeitado muy apurado con nueva navaja del doctor Guillotín. Durante todo el siglo XIX no pararon de liarSe la manta a la cabeza y le dieron más de un susto al monarca de turno. En esto del hola, buenas, venimos a cambiar las estructuras del Estado, los franceses tienen su puntito. Son muchos años y lo de darle canela fina a la reacción siempre ha estado de moda. Han tenido sus momentos, pero los conservadores franceses -por aquello de las osmosis- han acabado pareciendo revolucionarios en comparación con la caverna hispana- recuerden, aquellos de vivan las caenas y sus biznietos del nacional-catolicismo-. En fin, que nos llevan mucha ventaja los señores del norte. Los hijos de la Francia, que nos han dado bien por el culo muchas veces, pero que vistos sin pasiones, se lo curran. Ya me hubiese gustado nacer en un país dividido en depatamentos, capaces de enseñarle el dedo medio a los yuesei y que ahora, así, con dos bien puestos, pasan un huevo de pato de la Constitución Europea. Ellos tienen a Napoleón, y nosotros a Fernando VII. Ellos tienen a Degaulle y nosotros A Paquito, sobran comentarios.
Y es que un puntito de chovinismo está muy bien, miren ustedes. Eso de que no hablan inglés porque no les sale del arco del triunfo, aquello de poner pasta para que se hagan películas francesas o aquello otro de salirse de la OTAN por las buenas. Te pueden caer más o menos bien, pero hay que reconocerles que tienen un par bien puestos. Ahora han vuelto a demostrar que tienen muchos tiros pegados y que no son tan tontos como para creerse lo que les dicen por la tele, no como aquí. A ver qué hacen ahora los señores europarlamentarios. Les ha estado de coña que los ciudadanos franceses hayan pasado tanto de ellos como ellos querían pasar de los susodichos. Yo, de momento, me quito el sombrero ante los vecinos. Sí señor.

1 comentario

marquinho -

Moi aussi.